Estos días os habrán llegado muchas felicitaciones, dándole importancia al año nuevo y a todas los deseos y las metas que nos hemos propuesto, así como a todo lo que vamos a vivir. Pero la pregunta es… ¿dónde está la importancia del año que hemos vivido? ¿dónde queda el 2014?
Paremos un momento de soñar y hagamos un poco de reflexión sobre este año vivido. No te quedes solo con lo malo, o eches la culpa a los demás de todo lo que te ha pasado. Sé sincero contigo mismo. Haz una introspección para encontrar tus debilidades y tus fortalezas. ¡TODO SUCEDE POR ALGO!
Comienza valorando cada plano, no quites importancia a los detalles, lo puedes hacer mentalmente o mejor escribe sobre cómo te has sentido, qué cosas te han enseñando,… y dale mayor importancia a las que todavía sigues arrastrando.
No se trata de un proceso para juzgarte, sino de tomar conciencia de tu realidad. El pasado no es para archivarlo en una carpeta y olvidarnos, sino para que cada experiencia sume en actitudes y en valores en uno mismo.
Te invitamos a que realices una lista enumerando todas estas cosas para poder centrarte mejor en todos los detalles vividos. Para hacer esa lista, nos vamos a centrar en varios planos de nuestra vida:
- Vida material: Recuerda que, si tu economía falla, tendrás que dar mayor importancia a tus valores materiales, es decir, evaluar tu forma de considerar o gestionar tu dinero.
- Vida familiar: No te hagas cargo de las penas o necesidades de los otros. Cada uno tiene que resolver sus problemas, tú puedes enseñarles el camino, o dar un consejo, pero no solucionarlos por ellos.
- Vida personal: Observa si te has dado el espacio que te mereces, si has cuidado de ti, si has tenido tiempo para aquellas pequeñas cosas que te llenan,… Ese es el motor de la vida porque te produce alegría, te renueva como persona y te da fuerza para enfrentarte al resto de las cosas.
- Vida-amistad: Es importante sentarse a pensar y a valorar tus amistades y analizar si te sientes cómodo con ellas o, por el contrario, siempre es el mismo rol o la misma conversación. Propón a tus amigos hacer cosas diferentes o ábrete a conocer gente nueva, la cual te motive.
- Vida-salud: Toma conciencia de tu cuerpo y de lo que realmente necesita. Si tiene que descansar más o mejorar la alimentación, o simplemente mantener lo estupendo que estás. No esperes a tener un problema para solucionarlo, prevé todo lo que puedas para que en un futuro tu salud sea fuerte.
- Vida-amor: Refuerza tu relación si ya la tienes, observando o mimando a tu pareja con detalles pequeños pero que llenan. Si no la tienes, no tengas prisa, deja que fluya y permítete abrir tu vida a alguna persona para compartirla. Recuerda que tener pareja no es ser esclavo del otro, sino tener una persona a tu lado para que te acompañe en la vida, y poder disfrutar de ella.
- Vida-trabajo/proyectos: Valora tu actitud, cómo has enfrentado tu vida todo este año y proponte que cada día sea uno más de tu vida, un día importante. Deja de esperar el futuro y aprovecha cada segundo de tu presente, no esperes a los proyectos que lleguen sino crea cada día un grano de arena para construir lo mejor de ti mismo.
Nunca esperes el año siguiente, vive en el hoy.
El pasado no es una carga, es energía de impulso para vivir el presente.